Del 6 al 21 de noviembre se desarrolla la IV Bienal de Arte Contemporáneo de Salerno, Italia

Los cubanos poseen una creatividad a prueba de todo en cualquier ámbito de la vida.

Con igual destreza encuentran soluciones innovadoras desde situaciones de la vida común hasta en la biotecnología. Así también sucede con el arte que se produce en este archipiélago del Caribe.

No sorprende entonces que el arquitecto Giuseppe Gorga, curador y organizador de la Bienal de Arte Contemporáneo de Salerno y el comité científico del evento, destaquen el ingenio que le valió a las obras de artistas cubanos, entre ellos tres matanceros, la admisión en uno de los eventos culturales más importantes de México y Latinoamérica.

Desde hoy hasta el 21 de noviembre esta ciudad italiana “acoge las propuestas de más de 150 artistas procedentes de 35 países, entre los cuales las piezas cubanas resaltan por su originalidad”, a decir de Gorga.

A partes iguales ofrece una reinterpretación visual del poema homónimo de Laura Ruiz Montero

El matancero Erich González Triana le concede “tamaña importancia” a participar en la Bienal “ya que no soy graduado de academia y por tanto representa en lo personal un logro añadido al esfuerzo y la superación.

“Es un aliento a seguir creando y una gran oportunidad para exhibir mi obra ante especialistas y críticos de renombre, lo que conlleva a la posibilidad de legitimar mi trabajo y encontrar posibles horizontes  a proyectos o colaboraciones en el ámbito del arte.

“Estar presente en una bienal, aun cuando sea de modo virtual, supone un aporte enorme para mi corta carrera y un reconocimiento al valor artístico de mi obra. Estar vinculado a este evento ha sido maravilloso.”

Una escultura y una pintura fueron las obras que presentó. “La escultura se titula A partes iguales, es cerámica policromada, metal y papel. La concebí para mi exposición personal Prólogo de una antología, en la que ofrezco una representación visual de once poemas de poetas matanceros contemporáneos, a partir de esculturas y obras instalativas.

“A partes iguales es un bello e intenso poema de Laura Ruiz Montes. La amistad y ciertas circunstancias fueron su motivación. Yo solamente reflejé desde mi perspectiva personal y artística sus palabras, sus sentimientos.

La última palabra recrea la relación que se establece entre Eleggúa y una forma figurativa humana con notada tendencia creyente, se aprecia una dependencia entre ambos y la necesidad de asociar el pago a cambio de un beneficio

“La pintura se titula La última palabra y aborda la religión y sus desmedidas. Abordo este tema sin llegar a ser denuncia pero sí motivo de interés propio y quizás hasta general.

“Alude a las distintas circunstancias en la que pedimos o solicitamos consulta con este orisha y la exigencia del pago-palabra, destacando la marcada monetización en las religiones que han mercantilizado la fe.

Escuchar audio aquí: https://www.ivoox.com/erich-gonzalez-triana-audios-mp3_rf_77885514_1.html

El grupo de expertos a cargo de la admisión y curaduría del evento consideró que “la lona nos llamó la atención. La obra creada es óleo sobre lienzo, hilo, recursos del mar y metal, por eso forma parte del arte eco-sostenible tan apreciado por el mundo del arte desde hace años. En ella apreciamos una reinterpretación del arte italiano del siglo XIV. Es un trabajo particular”.

El miedo, la incertidumbre, la desesperanza son sentimientos que se perciben en las obras presentadas por Ernesto Cruz

Según las valoraciones de dicha comisión, Ernesto Cruz Hernández presentó un tríptico fotográfico que “transmite movimiento, tiene un gran dominio de sus medios. Observarlo es como mirar un video corto.”

El fotógrafo oficial del teatro Sauto, joya arquitectónica y cultural de la llamada Atenas de Cuba, describió sus imágenes como “un reflejo de cómo me sentía por el encierro, las preocupaciones, el temor a empeorar, tal como sucedió unos días.

Escuche audio aquí:https://www.ivoox.com/ernesto-cruz-hernandez-audios-mp3_rf_77886961_1.html

“Son tres fotografías de 60 por 60 impresas en geotextil en blanco y negro con edición digital fine art, hacia las bellas artes. Es un tipo de edición característica que requiere trabajo en la computadora. Las hice en mi casa en plena pandemia. En ese momento me había contagiado con la Covid 19.”

Vea el video aquí: https://www.facebook.com/JessiMatanzas/videos/236584478459498

Adrián Gómez Sancho presentó una obra “con técnica mixta, en la que fusionó la base pictórica del fondo que tiene un sabor étnico con técnicas tradicionales como el uso de pasteles y acrílico, con materiales de uso común como monedas y un disco de vinilo.”

Para el artista “participar en la Bienal de Salerno es una oportunidad para el artista y su obra porque hace que se visualice un poco más su oficio, fuera de las fronteras del país.

“La diversidad de formatos que se incluyen en esta cuarta edición (fotografía, instalaciones, pintura, dibujo, gráfica, videoarte, música, neurociencia de las artes, arte ecosostenible y música) y la variedad que le inyectarán sus participantes hacen que se hilvane la cultura de muchos pueblos. Representa un alto honor.”

El cardenense se insertó en el evento con dos obras: El peso de mi mundo y El mundo es como una rueda, las cuales forman parte de Universos, la nueva producción discográfica del cantautor Tony Ávila.

A decir de los especialistas “estamos frente a un trabajo que tiene el equilibrio final adecuado. No es tan fácil conseguir un buen resultado, muchas veces otros artistas tienden a exagerar cuando utilizan esta técnica de materiales para pegar sobre los lienzos con el resultado de que la obra ya no se puede leer.”

 

Primavera establece una conexión entre el hombre como ser social y la naturaleza como principio de todo

No menos significativa resulta la selección de los artistas del resto del país. Daimi Silva García presentó dos obras pictóricas “de gran impacto visual, un surrealismo muy agradable, donde el dominio en el uso del pincel es sinónimo.”

Con Primavera, Silva García pretende “un acercamiento a la fuente primigenia del ser, a la fuente de equilibrios constantes, a la que me debo o de la que soy parte, cómo fluye esta armonía que me redime y me sostiene. Propongo con esta obra el regreso a la cordura ancestral, un stop a la carrera egoísta que oscurece el futuro.”

Visitas ocasionales, de la serie Sucesos: “son piezas muy contemporáneas con pinceladas muy sueltas, de mucho colorido, de interioridades, venturas y desventuras en su totalidad”

Visitas ocasionales, de la serie Sucesos, “es más enigmática. Se trata de un elogio a nuestros orishas, tema que he tocado con anterioridad, pero esta vez desde otra perspectiva mucho más audaz y personal: el campo de la transculturación de generación en generación, de visitas que vienen anunciando un presagio, un evento, una premonición u otra acción de satisfacción y prevención.

“Son acciones inentendibles para muchos y coloquiales para otros. Verdad o mentira, existencia o fantasía, pero que suceden y vienen a nuestro alcance y a llamar nuestra atención. Misterio o creencia, como dicen: He ahí el dilema.”

Según su perspectiva como participante, “estar en la Bienal es un mérito al trabajo de varios años, una experiencia sin igual. Incluirme, en estos tiempos difíciles, es de total compromiso; estamos ante un evento de sumo nivel, multicultural, en un escenario poco conocido para los cubanos. Los medios digitales, producto a la pandemia que azota al mundo, abren las puertas a artistas y creadores que en muchas ocasiones no tenemos la oportunidad de insertarnos en eventos de esta magnitud.

“Que latinos alcancemos esta importante asistencia es un privilegio que nos facilita acceder al conocimiento e integración entre los continentes y sus artistas. Ser parte de este proyecto es un honor y ubica nuestro trabajo en otra dimensión.”

Para Jormay González Monduy, profesor hace dieciséis años en la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro, en La Habana, “siempre para cualquier artista sea del lugar que fuere es muy importante incluirse en una Bienal pues brinda más visibilidad a las obras y a la trayectoria del artista. Creo que Italia es cuna del arte, por eso amerita aún más estar incluido en ella.”

La técnica que resalta en su propuesta visual es pintura en lienzo con técnica mixta y algunos elementos tridimensionales incorporados. “A nivel conceptual, explica el autor, las obras juegan con la postura que asume el ser humano ante el mundo que lo rodea, cómo es capaz de buscar la felicidad, de ayudar y compartir, pero al mismo tiempo puede destruir, causar la guerra, el odio y el caos.

“Propongo con ello una reflexión sobre todos estos aspectos con los que el ser humano intenta o no buscar un cambio para su existencia.”

La confluencia de diversas culturas procedentes de todos los continentes le aportan riqueza a la Bienal de Arte Contemporáneo de Salerno. Italia se vestirá con los colores de muchos países que expondrán su identidad a partir de una variedad de técnicas, estilos estéticas, lenguajes y discursos visuales.

En tiempos de pandemia y muertes, la Bienal de Arte Contemporáneo de Salerno representa la demostración de que la cultura sana espíritus, alimenta el alma y une a los pueblos.

El arte nacional, orgullo para quienes habitamos este pequeño archipiélago del Caribe, llegará a uno de los principales centros culturales del mundo. Cuba llevará una representación de su idiosincrasia, impresa en las piezas de estos creadores.

Entre el 6 y el 21 de noviembre, sin importar idiomas, razas, credos, géneros o ideologías, desde la obra de los artistas cubanos todos tendremos una misma voz, un mismo corazón e iguales motivos: ver crecer el arte, cerrar las heridas abiertas por una pandemia que ha motivado demasiado sufrimiento y abrazar la vida desde la esperanza y el amor.

Publicado originalmente en Cubahora